El juzgado 20 penal del circuito de Bogotá condenó a Gloria Aideé Huertas Riaño a 50 años de prisión por el asesinato de su esposo, el policía Iván Zorro, y sus dos hijos, el 24 de marzo del 2019.
La Fiscalía explicó que la procesada y su esposo salieron a departir la noche del 23 de marzo del año pasado, y la madrugada del día siguiente, cuando volvieron a su casa, en Puente Aranda, se presentó una discusión.
“El hombre decidió dormir en el sofá de la sala. La mujer se había quedado en la habitación principal del inmueble; sin embargo, intempestivamente, fue a la cocina, cogió un cuchillo y atacó a su compañero por la espalda. Posteriormente, se dirigió a la alcoba de sus hijos, de 10 y 7 años, y también los agredió con arma cortopunzante hasta causarles la muerte”, precisó en un comunicado La Fiscalía.
A las 9 de la mañana del 24 de marzo, esta persona llamó a algunos familiares e intentó cambiar la versión de lo ocurrido, pero varias cortadas en las manos, testimonios y otros elementos de prueba obtenidos por personal del CTI la pusieron en evidencia.
“Días después, el 10 de abril de 2019, la Fiscalía le imputó cargos y, desde entonces,
cumple medida de aseguramiento en centro carcelario”, explicaron.
Antecedentes
No era la primera vez que Gloria Aideé Huertas Riaño amenazaba con un cuchillo a Iván Arturo Zorro. Tampoco era la primera ocasión en que los vecinos del conjunto residencial Parques de Primavera escuchaban una discusión entre la pareja de esposos del apartamento 510 de la torre 5.
Lo que sí era una novedad era que después de los gritos y los insultos se escuchara el ruido de los muebles siendo trasladados de un lado a otro.
Esta pudo haber sido una señal de alerta para los vecinos de los pisos de abajo; sin embargo, apenas se convirtió en una anécdota dentro del relato del fiscal del caso, revelada durante la audiencia de imputación de cargos en contra de Gloria Aideé Huertas Riaño, a quien el ente acusador responsabiliza de la muerte de su esposo y de sus dos hijos.
Según el relato de la Fiscalía, en la tarde del 23 de marzo de 2019 la pareja decidió salir a tomar unas copas a un bar del barrio Galán y dejar a los niños durmiendo. Cuando volvieron a su casa, después de estar cerca de tres horas por fuera, iniciaron una discusión motivada por los celos de Gloria Aideé.
De acuerdo con los testimonios recogidos por el fiscal del caso, los vecinos escucharon, hacia la 1:30 a. m, gritos, gente corriendo, golpes y la voz de Gloria Aideé repitiendo en varias ocasiones “por esa mujer, por esa mujer”.
Durante la reconstrucción de los hechos, la Fiscalía sostuvo que cuando Iván estaba durmiendo ella tomó un cuchillo de la cocina, se acercó lentamente hacia el hombre, y le propinó 2 puñaladas en el tórax y 6 más en la espalda. El hombre, quien solo tenía puesta una camiseta negra y su ropa interior, murió en cuestión de segundos sobre un tumulto de ropa y al lado del sofá, debido a un sangrado masivo.
Posteriormente, la mujer asesinó a los dos menores en el cuarto principal de la casa, lugar en donde los dos niños dormían “para intentar simular un caso de defensa propia”, dijo la Fiscalía.
Uno de los argumentos del ente acusador es que el hombre no pudo haber matado a los niños pues en la planta de los pies no había rastros de sangre, situación que pondría en entredicho la versión de Gloria, en la que afirmaba que hubo un forcejeo previo a la muerte de sus hijos.
Dos hechos que llaman la atención del caso, sucedieron entre las dos y las tres de la madrugada. Tras la inspección que realizó la Policía Judicial en la casa de la familia Zorro Huertas, las autoridades pudieron determinar que del teléfono celular de la mujer, salieron tres fotos entre 2:54 a.m. y 2:56 a.m. dirigidas a su hermana, en donde le manifestaba que ella había matado a su esposo.
Otra de las situaciones llamativas, es que se logró comprobar que Gloria Aidee llamó, desde el teléfono de su casa, más de 45 veces a quien sería la amante de Iván Arturo Zorro.
Otra de las pruebas que presentó el fiscal son dos manuscritos de Gloria Aidee, en los que le escribe a Iván “lo pillé” aludiendo a la infidelidad de su pareja, lo que según el fiscal, comprobarían que ella sufría de celos excesivos y que tal situación, la habrían llevado a cometer el triple asesinato.
Fuente y Fotografía eltiempo.com