El último balance eleva a medio centenar la cifra de víctimas mortales tras la tormenta invernal que azota el país y se espera que la cifra continúe aumentando en los próximos días.
El mayor número de muertes se han notificado en el estado de Nueva York, donde han muerto al menos 27 personas por la ola de frío polar procedente de Canadá. Otras 14 han muerto en Buffalo.
El alcance de la tormenta no tiene precedentes, afectando partes del medio-oeste y este de Estados Unidos desde hace seis días, según indica la cadena CBS. El temporal ha causado cortes de electricidad, cancelación de vuelos y ha convertido en peligrosas las calles y carreteras.
Millones de personas se han refugiado de la helada durante la noche y la madrugada, sin embargo, la tormenta ha atrapado a algunos residentes dentro de sus viviendas por las acumulaciones de nieve. Asimismo, ha dejado sin electricidad a miles de ciudadanos.
La gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, ha afirmado que es la tormenta “más devastadora” en la Historia de Búfalo, donde han caído cerca de 100 centímetros de nieve.
“No puedo exagerar lo peligrosas que siguen siendo las condiciones”, ha precisado Hochul, instando a los vecinos a mantenerse alejados de las carreteras en Navidad.
Pese a que las condiciones meteorológicas han mejorado durante la jornada, más de 55 millones de personas están bajo alerta de bajas temperaturas, siendo el 25 de diciembre más frío desde 1983 para ciudades como Miami, Tampa, Orlando y West Palm Beach.
Además, se han cancelado más de 3.000 vuelos en la víspera de Navidad, mientras que este 25 de diciembre se han cancelado 2.000 vuelos.
Aproximadamente el 60 por ciento de la población estadounidense ha recibido algún tipo de alerta por las condiciones meteorológicas durante el fin de semana.
Masivos cortes de energía
Desde la noche del miércoles, Estados Unidos se ve azotado por esta tormenta de rara intensidad, cuyos vientos polares han provocado fuertes nevadas, especialmente en la región de los Grandes Lagos.
Decenas de millones de estadounidenses vieron trastocada su Navidad por cortes de energía masivos, carreteras intransitables y miles de vuelos cancelados, que causaron caos en los aeropuertos.
El lunes, más de 1.700 vuelos seguían cancelados en Estados Unidos, según el sitio de seguimiento Flightaware.com.
Durante el fin de semana, se registraron temperaturas bajo cero en 48 estados de Estados Unidos.
En un momento del sábado, casi 1,7 millones de hogares se quedaron sin electricidad por la tormenta, según el sitio especializado poweroutage.us.
Los apagones se redujeron sustancialmente, aunque todavía había unos 50.000 abonados sin electricidad el lunes por la mañana en la costa este de Estados Unidos.
Se espera que el tiempo mejore gradualmente a medida que avanza la semana.
El clima extremo “continuará causando condiciones de viaje peligrosas a nivel local durante los próximos dos días”, advirtió el NWS en su último boletín.
“La mayor parte del este de Estados Unidos permanecerá en condiciones de congelación hasta el lunes, antes de que se establezca una tendencia más moderada a partir del martes”, agregó.
Fuente y Fotografía Elnuevosiglo.com