SIGUE LA inconformidad en el sector transporte por el incremento mensual en el precio de la gasolina, que en 2024 también tocará el ACPM. Los camioneros manifestaron su preocupación por el impacto en los costos de operación que esto tendría y la consecuente necesidad que habría de subir fletes, que encarecería todos los productos. A pesar de que ayer iniciaron mesas técnicas con el Gobierno para conversar buscando soluciones, no descartaron ir a paro.
Mientras que los taxistas anunciaron ayer que irán nuevamente a paro este 22 de noviembre para presionar del Gobierno soluciones por el incremento en el precio del combustible, así como porque siguen sin regular las plataformas tecnológicas en el transporte de pasajeros, y por ello alegan que sufren competencia desleal por servicios como Uber y Cabify.
En cuanto a la problemática que acusan los camioneros, el presidente de la Asociación Colombiana de Camioneros y la Cámara Intergremial del Transporte, Alfonso Medrano, dijo que “podría haber un paro” por la inconformidad que hay en el sector.
Agregó el dirigente del transporte “queremos dar una discusión técnica. Llegar a un acuerdo con el diálogo y tenemos a nuestros técnicos expertos para argumentar desde las fórmulas que se debe mantener el precio o bajarlo”.
Sostuvo también Medrano que “no estamos defendiendo nuestro sector. Es hacer reflexionar al Gobierno que si nos sube el ACPM tendrá que subir de inmediato los fletes, y qué hacerlo tendrá unas consecuencias en los costos de transporte de alimentos, pasajeros, transporte público. Sería el acabose de la economía”.
Los transportadores de carga por carretera sostienen que el combustible ACPM representa entre el 40% y el 60% de los costos de operación, y que los incrementos que se propone hacer el Ejecutivo desde febrero de 2024 afectarían más de 400.000 camiones, volquetas y tractocamiones; cerca de 200.000 buses, busetas y microbuses.
El valor del galón de gasolina ha sufrido un fuerte incremento mensual, con la excepción de septiembre anterior, en este Gobierno, pues en agosto del año pasado estaba en $ 9.180 y en la actualidad en promedio supera los $ 14.000
Sin embargo, el Gobierno se ha cuidado este año de no modificar el valor del galón de ACPM por el efecto que podría tener en la inflación, debido a que la mayoría de los vehículos de carga y transporte de pasajeros utilizan este combustible.
Empero el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, ha anunciado que el ACPM también subirá de precio el año entrante.
“Fue necesario tomar una decisión que no es popular y es incrementar el precio de los combustibles. Después de que se cierre la gasolina, vendrá el tema de lo que haremos con el diésel. Es una decisión fiscalmente responsable. El déficit del FEPC (Fondo de Estabilización de Precios de Combustibles) va a cerrar en 2025 en $ 100 billones, esto es equivalente a cinco reformas tributarias. Estamos destinando los recursos a pagar el diferencial de la gasolina, esos recursos deberían destinarse a estimular la actividad productiva”, expresó Bonilla.
Protesta de taxistas
El presidente de la Asociación de Propietarios y Conductores de Taxi (Asoprotax), Hugo Ospina, dijo que “ayer se decidió para el día 22 de noviembre del 2023 un gran cese de actividades, un paro de taxistas en la capital de la república por las tres estafas que le vienen haciendo no solamente a los taxistas, sino a toda la ciudadanía. Tema combustibles, no más estafas, tema fotomultas, no más estafas y el tema de la ilegalidad, nos mamamos de la ilegalidad”.
Dijo también Ospina en su cuenta en ‘X’ acerca de las plataformas tecnológicas en el transporte de pasajeros, que “el gremio de taxistas, jamás se ha opuesto a la tecnología. La Constitución, es muy clara frente a los servicios públicos y privados, el público es para satisfacer necesidades de los demás, el privado es para satisfacer necesidades propias”.
Producto de los repetidos paros de taxistas, el más reciente la semana anterior, el Gobierno ha propuesto en la mesa que tiene con ellos varias fórmulas para paliar los reajustes en el precio de la gasolina.
Primero el Ministerio habló de incrementar el valor de la carrera; luego en agosto en una de las mesas de diálogo se acordó una tarifa diferencial en el galón de gasolina más baja para los taxis, para que tuvieran un ahorro aproximado de $ 3.000.
Sin embargo, el Gobierno terminó desechando la medida debido a las dificultades que tenía para su implementación, pues se podría prestar para irregularidades, como que algunos avivatos revendieran la gasolina, aprovechando que la compraban más barata.
Luego el Gobierno determinó que mejor les daría un bono de compensación a los taxistas por unos pocos meses, de entre $ 80.000 y $ 100.000 mensuales. Sin embargo, esto tampoco ha funcionado porque apenas unos 40.000 de los más de 300.000 que hay en el país se han inscrito en el RUNT (Registro Único Nacional de Tránsito), uno de los requisitos que deben hacer.
Fuente y Fotografía Elnuevosiglo.com