Tras identificar la necesidad de fomentar una cultura productiva y sostenible, el Ejército articuló esfuerzos con entidades como Casa Luker, la Federación Nacional de Cacaoteros, la Secretaría de Desarrollo Económico, Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente de la Gobernación de Casanare y la Alcaldía Municipal de Maní, consolidando una alianza estratégica para hacer realidad este proyecto.
El aporte del Ejército ha sido fundamental, no solo en la gestión de recursos e insumos, sino también en el acompañamiento técnico y formativo, brindando mano de obra y apoyo constante en el terreno. En esta primera etapa, se ha dado inicio a un vivero forestal, según la Resolución 0780006 del ICA, esencial para la implementación de sombrío permanente en los cultivos de cacao mediante árboles forestales, una práctica clave para la sostenibilidad del cultivo.
Los estudiantes de los grados noveno, décimo y once son protagonistas activos en este proceso formativo. A través de talleres teórico-prácticos, aprenden sobre pre germinación, germinación, crecimiento de plántulas, zonas de enraizamiento y descarte, y llenado de bolsas, fortaleciendo el vivero institucional con más de 150 árboles que serán plantados en zonas que requieren recuperación de terreno. Además, este esfuerzo permitirá a los estudiantes apoyar a sus familias, facilitando árboles para sus propios cultivos de cacao, generando así un beneficio directo en la economía familiar.
Este proyecto no solo busca fomentar competencias técnicas en los jóvenes, sino también despertar en ellos una vocación productiva y ambientalmente consciente. Es una iniciativa que trasciende el aula, construyendo futuro desde el campo.
Con iniciativas como esta, el Ejército Nacional a través de su programa Fe en Colombia reafirma su compromiso con el desarrollo rural, apostando por una educación con propósito y cultivando esperanza en el corazón de Colombia.
Fuente y Fotografía Ejército Nacional