El expresidente de Colombia, Álvaro Uribe Vélez, enfrenta un momento crucial con el fallo judicial programado para este lunes 28 de julio de 2025, que determinará si es culpable o inocente de los delitos de soborno a testigos y fraude procesal. Este caso, que lleva más de una década en curso, no solo tiene implicaciones legales, sino también un impacto profundo en el panorama político colombiano.
Álvaro Uribe Vélez, el Gran Colombiano, ha sido juicioso, puntual y responsable en su defensa indicó Olaya Mancipe, quien dijo que los argumentos tanto de su defensa técnica como de su defensa material han sido contundentes para demostrar, que su actuar no ha sido espurio ni mucho menos delictual. De hecho, el presidente ha hecho el llamado al pueblo colombiano a revisar las miles de horas que de forma ilegal le interceptaron para que sean testigos de la verdad única y absoluta: él es inocente.
Por otro lado, la ausencia de una “prueba reina” en el juicio, como se ha señalado en algunos medios, y como ha sido claro en su proceso, sirve para cuestionar la legitimidad del proceso en sí mismo advirtió el representante a la Cámara por Casanare de Centro Democrático, quien dijo que la percepción de que el proceso carece de evidencia sólida se entiende de nuevo como persecución política, generando simpatía entre quienes dudan de la imparcialidad de la justicia colombiana, especialmente en un contexto de polarización política.
Así las cosas, agregó que Uribe debe ser hallado inocente, y así el fallo representará una victoria jurídica y política significativa. La absolución reforzaría la idea clara de una persecución política orquestada por sus adversarios, particularmente por sectores de izquierda como el senador Iván Cepeda y figuras asociadas al actual gobierno de Gustavo Petro. Esta narrativa ha sido central y el veredicto favorable hará hincapié en lo que creemos:
“Uribe es un líder injustamente atacado, fortaleciendo su imagen de resiliencia y legitimidad ante sus seguidores. Además, una absolución le otorgaría a Uribe mayor libertad para moverse en el escenario político sin las restricciones de un proceso judicial. Podría retomar un rol más activo en la oposición, desafiando directamente al gobierno de Petro y posicionándose como una figura clave en la articulación de candidaturas para las próximas elecciones presidenciales. Su capacidad para contradecir al oficialismo, ya demostrada durante su carrera, se vería amplificada, permitiéndole recuperar terreno como líder de la derecha colombiana. Como señala un análisis en X, una
absolución le daría “rienda legal” para actuar con mayor holgura”, indicó Vladimir Olaya.
Álvaro Uribe Vélez seguirá ejerciendo su liderazgo y oposición férrea a este desastre de gobierno aprovechando su capacidad para mantenerse relevante políticamente, sin importar las circunstancias, ha sido una constante en su trayectoria sostuvo.
El pueblo entenderá que es alguien que enfrenta la justicia por defender sus ideales y su legado. Es por esto que él va a terminar atrayendo a votantes desencantados con el gobierno actual y movilizando a la oposición en torno a su figura para las elecciones tanto de congreso como de presidencia del próximo año aseveró el congresista casanareño.
“Es menester igual aclarar que, como explicó el abogado penalista Santiago Trespalacios, el fallo es susceptible de apelación ante el Tribunal Superior de Bogotá y, eventualmente, de un recurso de casación ante la Corte Suprema de Justicia. Esto significa que independientemente del
resultado, este proceso se irá a segunda instancia y, quizá, incluso hasta la Corte Suprema de Justicia quien tendría la última palabra sobre el tema”, señaló.
En conclusión, indicó Olaya Mancipe que Álvaro Uribe emerge como un ganador político en este injusto proceso debido a su capacidad para liderar y resolver en situaciones de diferente índole. Debe ser absuelto y así consolidará su liderazgo y movilizará a la derecha con un mensaje de reivindicación. En un país polarizado como Colombia, Uribe saldrá “avanti” el 28 de julio.
Editorial para Radio Noticias Casanare, H.R. Vladimir Olaya