Tras ser diagnosticado con muerte cerebral, en la mañana de este miércoles falleció el patrullero Albeiro Garibello Alvarado, de 23 años, uno de los 26 uniformados de la Policía que había resultado gravemente herido tras la explosión registrada en la mañana del domingo en el barrio La Macarena, del centro de Bogotá.
El patrullero, quien hasta ayer tenía un reporte reservado, fue diagnosticado con muerte cerebral. “Se procede a realizar gammagrafía cerebral (procedimiento con rayos gamma) que comprueba la ausencia de flujo sanguíneo lo que es conducente con signos radiológicos y clínicos de muerte cerebral”, indicó el último reporte del Hospital Central de la Policía.
La Policía Metropolitana de Bogotá lamentó la muerte del patrullero Albeiro Garibello y señaló que “el mayor homenaje en su memoria, será capturar a los responsables de este condenable hecho y continuar trabajando por garantizar la seguridad de toda la ciudadanía”.
Debido a la situación, la institución está prestando acompañamiento psicosocial a los familiares de Garibello. El centro hospitalario había reportado este martes que tres policías siguen en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI). Uno de ellos, en grave estado de salud.
Jhon Arley Herrera, el uniformado que reportaron inicialmente como fallecido tras el ataque, también continúa en la UCI. El dictamen médico indica que presenta trauma de cráneo. Herrera tiene esquirlas cerebrales y traumas en su ojo derecho, aunque, por fortuna, no está comprometido el globo ocular.
Se espera que, tras la última valoración del departamento de neurocirugía del Hospital, se pueda trasladar a piso para hospitalización. El tercer patrullero en cuidados intensivos es Fidel Cubillos Roncancio, quien solo ha tenido una mejoría de su tensión arterial. Cubillos permanece con trauma abdominal, lo que ha ocasionado inestabilidad de sus signos vitales.
El alcalde de Bogotá, Enrique Peñalosa, dijo este martes que la ciudad está bajo “amenaza”, luego de la explosión de un artefacto cerca de la plaza de toros que dejó a 26 personas heridas, la mayoría de ellos policías.
“Les hago una solicitud, no para sembrar la alarma, pero sí para tener claro que tenemos una amenaza y que en eso tenemos que estar todos unidos”, afirmó el mandatario, en un pedido para que los ciudadanos denuncien ante las autoridades “cualquier tipo de sospecha”.
La explosión el domingo de un artefacto, con hasta 1,5 kilos de amonal con metralla, dejó 26 personas heridas, entre ellas 24 policías y dos civiles, según el Ministerio de Defensa.
Fuente y Fotografía ElEspectador.com