La vicefiscal general, María Paulina Riveros Dueñas, aseguró que los investigadores realizan las pesquisas al ‘círculo’ cercano de Sara Ayolina Salazar Palacio, la niña de 3 años que murió luego de ser víctima de abusos sexuales y físicos, en hechos ocurridos en la vereda El Palmar, de Armero Guayabal, en el norte de Tolima.
investigando a las personas más cercanas a la niña, a su círculo más próximo, y por su puesto investigando no solamente la muerte de la niña y la violencia sexual, sino todo el tipo de violencias que presenta el cuerpo en este caso”, dijo Riveros Dueñas.
La vicefiscal además señaló que se plantea investigar a los funcionarios de la Comisaría de familia por permitir que la menor estuviera bajo custodia de sus padrinos, “por acción o por omisión hayan podido dar lugar al resultado“.
Por su parte, el Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses confirmó signos de violencia sexual y tortura continuada, luego de la necropsia practicada al cuerpo de la niña de tres años.
La Policía Metropolitana de Ibagué reportó el sábado que Sarita llegó al hospital Federico Lleras con trauma craneoencefálico severo, múltiples heridas con elemento cortopunzante y signos se haber sido violada. También se descubrió que tenía mutilado parte de uno de sus dedos y que estaba desnutrida y con problemas para respirar
Según el médico Juan David Pabón, quien le prestó atención a la pequeña en Armero cuando su cuidadora Ángela Guerra la llevó, el estado de la menor era crítico. Fue el primero en alertar a las autoridades que la explicación que entregó Guerra sobre lo que le pasó a Sarita era contradictoria y se trataba de un caso de negligencia.
Fuente y Fotografía ElEspectador.com