En su retorno al país, tras su corto viaje a Francia, el presidente Iván Duque se ha encontrado con un clima social más caldeado que el que dejó el pasado domingo.
Para este jueves está programada una jornada nacional de movilización convocada por estudiantes, educadores y centrales obreras para exigir más recursos para las universidades públicas y en protesta contra un IVA generalizado a la canasta familiar; se mantiene el paro universitario; una minga indígena arribó desde el Chocó a la capital de la República para exigirle al Gobierno el cumplimiento de acuerdos; y hay malestar en los transportadores de carga por el incremento en el precio de los combustibles.
Este panorama se configura cuando están frescos los brotes de violencia que se presentaron hace ocho días por parte de algunos manifestantes –tildados de infiltrados por algunos-, que derivaron en hechos de vandalismo, especialmente en la capital de la República, en donde se registraron 12 policías lesionados, 68 vehículos de Transmilenio vandalizados, 18 estaciones con daños y 18 personas fueron conducidas al Centro de Traslado por Protección.
De igual forma ronda el fantasma de la eventual convocatoria de un paro nacional, como lo han señalado la CUT, la CTC y Fecode, decisión que se tomaría después de otra jornada nacional de movilización convocada para el 28 del presente mes.
Este ambiente enrarecido de agitación social se le formó en pocas semanas a una administración como la de Duque, quien el próximo sábado cumplirá 100 días en el poder y que, por tanto, apenas está sentando las bases en materia legislativa, su programa de gobierno y el Plan Nacional de Desarrollo 2018-2022.
Principalmente, dos fueron los hechos que detonaron esta suma de inconformidades sociales que se aglutinan en este momento: en primer lugar y a propósito de la aprobación por parte del Congreso del Presupuesto General de la Nación para 2019, los estudiantes universitarios reactivaron sus reclamos por mayor inversión en la educación superior. Exigieron $3,2 billones al Ejecutivo para funcionamiento y $15 billones correspondientes a una deuda histórica que ha ido creciendo en los diferentes gobiernos en materia de infraestructura.
A pesar de que el Congreso aprobó en el Presupuesto General para 2019, por $258,9 billones, una partida de $41,4 billones, los estudiantes universitarios se fueron a paro en las 32 almas mater estatales desde el pasado 11 de octubre. En este interregno la ministra de Educación, María Victoria Angulo, y los jóvenes acordaron una mesa de diálogo que se reunió en un par de oportunidades, pero que se interrumpió el pasado 6 de noviembre después de que el Gobierno advirtiera que no había más plata de la que ofreció.
El pasado viernes el presidente Duque dijo, que “están exigiendo $500.000 millones antes de finalizar el año, pero no los hay”.
Ayer se revelaron los resultados de un sondeo virtual que realizó la Universidad Nacional para conocer la opinión de sus estudiantes sobre si quieren volver o no a clases y finalizar el paro que completa más de un mes. Esto después de que la rectora Dolly Montoya conminara a volver a las aulas el día de ayer para salvar el semestre.
La mayoría de los estudiantes, 19.255, se manifestaron en favor de continuar el paro hasta lograr los objetivos de la protesta; en tanto que 8.475 pidieron reanudar las actividades académicas. No obstante, Alejandro Palacio, líder de los estudiantes, afirmó que “siempre ha existido la voluntad de las conversaciones y buscar una solución al paro que cumple más de un mes”.
Asimismo, la vocera de la Universidad Nacional, Jennifer Pedraza, se refirió a la mesa de diálogos que planean retomar con la ministra de Educación, indicando que si bien aún no han sido notificados, esperan contar con la presencia de un delegado del ministerio de Hacienda.
También el día de ayer se presentaron en Barranquilla choques entre estudiantes de la universidad del Atlántico y la policía.
La Ministra de Educación ya hizo un llamado para retomar el diálogo. “El llamado es a buscar un escenario donde todos dialoguemos, para que puedan culminar su semestre. Cada universidad tomará su decisión según el contexto”.
Un segundo hecho que enrareció el clima social en el país fue el proyecto de ley de financiamiento (reforma tributaria) que presentó al Congreso el ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla, la cual grava con IVA casi la totalidad de la canasta familiar para sufragar un déficit fiscal de $14 billones que heredó este Gobierno.
Las centrales obreras y las fuerzas de oposición en el Congreso rechazaron al unísono esta iniciativa y anunciaron movilización en las calles buscando que el Ejecutivo recule en este propósito.
La minga
El pasado lunes arribaron a Bogotá más de 450 indígenas provenientes del Chocó para reclamar el cumplimiento de acuerdos establecidos en 2017 en el marco de la Minga Indígena por la Vida, acuerdos que según ellos han sido incumplidos de manera unilateral por el Gobierno nacional.
Ayer el Ministerio del Interior señaló en un comunicado que las conversaciones se adelantan desde el pasado 2 noviembre, para resolver las necesidades y atender las peticiones de las comunidades Embera Dóbida, Katío, Wounaan, Eyabida y Zenú del Chocó.
“En las últimas horas, el Gobierno envió una comisión en cabeza del Ministerio del Interior, junto a diferentes entidades, con el fin de convocar una mesa interinstitucional para mantener el diálogo social y encontrar soluciones a la problemática de la comunidad”, indicó esta cartera.
Camioneros
Los camioneros han manifestado su descontento por las continuas alzas en la gasolina y en otros rubros, por lo que amenazan con parar sus vehículos el próximo 23 de noviembre. El presidente de Asecarga, Jairo Herrera, dijo que “por asunto de voz a voz del gremio se ha recibido una fecha que han propuesto para el 23 de este mes para una inmovilización de camioneros en todo el territorio nacional porque prácticamente paraliza la economía nacional con todos esos costos que eso genera”.
Fuente y Fotografía Colprensa-elnuevosiglo.com.co