Las confesiones de Jaime Iván Martínez Betancurt empezaron a comprobarse. Este hombre, que empieza a ser conocido como el asesino de Guarne, le contó a la Fiscalía cómo había matado y enterrado a su esposa, Natalia García Gil, y a sus dos hijos menores de edad. Ayer, la Fiscalía confirmó haber hallado sus restos y haberlos identificado preliminarmente, aunque aún faltan hacer los cotejos de ADN. (Lea: “La evidencia aún no indica que el de Guarne sea un asesino serial”: psicólogo forense)
En entrevista con este diario, Luis González, el director de Seccionales y Seguridad Ciudadana de la Fiscalía, confirmó que se habían encontrado ya tres cadáveres en una finca de la vereda Hojas Anchas, dos de ellos correspondientes a los cuerpos de un niño de 5 y otro de 7 años. El CTI tiene información de que allí hay un cuerpo más, así como de otros en distintas zonas del municipio. (Lea: Fiscalía halla primeros cuerpos de víctimas de asesino serial en Antioquia)
Desde el domingo hay un equipo de antropólogos y fotógrafos apoyando las nuevas labores de exhumación en Guarne, una investigación que tuvo como punto de partida el reporte, el 19 de enero pasado, de la desaparición de una mujer llamada María Gladis Arango, cuyo cuerpo (posiblemente) fue hallado el pasado domingo 19 de junio. Fue en ese momento que Jaime Iván Martínez Betancurt confesó haber cometido casi 20 asesinatos más.
González, sin embargo, lo descarta de entrada. “Es una persona que sabía lo que estaba haciendo. Vamos a esperar para imputar todos estos hechos dentro de un solo proceso. Hemos encontrado que asesinó a sus propios hijos, a su compañera, a María Gladis Arango. Son delitos como desaparición, tortura, homicidio. Podría recibir la máxima pena, que son 60 años de prisión”.
En la investigación por la desaparición de María Gladis Arango, los agentes del CTI siguieron las llamadas hechas desde y hacia el teléfono celular de la desaparecida: Martínez Betancourt siguió usándolo. “Los familiares de las víctimas pensaban que estaban hablando con su familiar, que la persona en cuestión se había ido de la casa pero estaba bien, cuando en realidad estaban hablando con el victimario”.
Se calcula que el 15 de noviembre de 2015 Martínez asesinó a la que fue su pareja, a su hijo de 7 años e hija de 5 años, ahorcándolos con un hilo de nylon. Los perros que los agentes llevaron para la operación rastrearon una fosa dentro de la misma finca en donde se encontraron varios restos humanos. Según lo que la Fiscalía sabe hasta el momento, las demás víctimas fueron atacadas en otros lugares del departamento de Antioquia y el Valle del Cauca. Se cree que la mayoría de sus víctimas son mujeres, según González. “Él coleccionaba rastros y en la vivienda se encontraron más de 12 celulares, más de 16 sim card y ropa de mujer. Eso nos hace pensar que lo que dice es cierto”, dijo el fiscal.
El primer cargo imputado al asesino fue el de desaparición forzada, por este delito ya se encuentra con medida de aseguramiento en centro carcelario del CTI en Medellín.
Fuente y Fotografía ElEspectador.com – Fiscalía General de la Nación