• vie. Abr 19th, 2024

Y el mundo paró y se encerró. Y así, los seres humanos comenzaron a experimentar una sensación desconocida por completo, con pensamientos de temor y desesperación que se acumulaban en sus cabezas.

El artista bogotano Ányelo López tampoco fue ajeno a esa extraña emoción existencial, que tantos afrontan en el país desde hace más de 50 días. En medio de la incertidumbre, López apeló al dibujo como su tabla de salvación, así como otros lo han hecho a través del ejercicio, la meditación, la lectura o la música.

“Sentí la necesidad de expresarme a través del arte”, comenta. Entonces tomó una pequeña libreta de 14 por 21 centímetros que le permitió iniciar un diálogo con maestros suyos famosos de la historia del arte universal, de otros tiempos.

Ányelo López artista plástico

El colombiano Enrique Grau.

“Me refugié en mis libros de arte y comencé a detallar los autorretratos de Van Gogh, Frida Kahlo, Dalí, Obregón, Da Vinci o Enrique Grau, entre otros artistas; decido contextualizarlos en una época actual y de pandemia, dibujándolos con mascarillas de prevención respiratoria”, explica.

Al primero al que se le ocurrió cubrir con este elemento fue al neerlandés Vincent van Gogh, a partir de uno de sus autorretratos más famosos. “Me encanta la vivacidad de su color, pero sobre todo lo que revela en la expresión de su rostro en esta obra, pues pareciera que quisiera decirnos algo y, por qué no, quizás prevenirnos también de algo”, explica el artista.

(Le puede interesar: Se está desvaneciendo ‘El grito’, la famosa pintura de Munch)

Ányelo López artista plástico

El colombiano Alejando Obregón.

Con el pasar de los días siguió cubriéndoles el rostro a otros pintores reconocidos –en una especie de diario–, a los que se unieron también colombianos. Entonces, al artista se le ocurrió comenzar a poner en sus redes los dibujos. Su sorpresa fue grande: Muchos de sus seguidores reflexionaron sobre la importancia de protegerse.

“El artista está en la obligación moral de hacer visible lo que para muchos es invisible. He pensado que los creadores debemos aportar algo a la sociedad y que el talento que se nos ha dado debe servir para la meditación”, explica López.

Y se atreve a avanzar la discusión más allá de esta coyuntura que vive la humanidad, para aludir también a la contaminación y el afán desmedido de consumo de las sociedades y sus consecuencias para el planeta. “Si no tomamos las decisiones correctas, el ser humano podría vivir de por vida con estas máscaras”, anota.

El artista está en la obligación moral de hacer visible lo que para muchos es invisible.

Ányelo López artista plástico

Si bien el artista es amante del grabado y trabaja también en óleo, acrílico o acuarela, para esta serie se decidió por los lápices de color. “Esta es una maravillosa técnica que permite la mezcla espontánea de tonos y colores, además de ser una práctica que admite llegar a altos niveles de realismo”, comenta.

(Lea además: ‘¡No pagues el arriendo!’: obra visceral de Óscar Murillo)

Esta pasión por el arte le viene a López desde niño, gracias a la influencia de su padre, también artista. Su amor por el retrato comenzó desde el bachillerato, cuando se dio cuenta de que podía dibujar con gran facilidad a sus compañeros de colegio y a sus profesores. Entonces decidió seguir la formación como artista plástico en las universidades Distrital y Santo Tomás.Su trabajo se ha expuesto acá y en países como Brasil, España y Argentina, entre otros, con una veintena de muestras que ya suma en su trayectoria artística.

Ányelo López artista plástico

Ányelo López se formó como artista plástico en las universidades Distrital y Santo Tomás.

Ahora, para seguir aportando desde el arte, López ha decidido iniciar una serie de cursos gratuitos de arte a través de su cuenta @anyelolopezart en Instagram, todos los lunes a las 3 p. m.

“No se requieren conocimientos previos, en el ‘live’ les enseño a mis seguidores temas de historia, movimientos artísticos, datos curiosos de distintos artistas, así como temas de perspectiva, proporción, volúmenes, sombras y luces a través de la técnica del color, donde los participantes desarrollan una ilustración en tiempo real”, explica.
Cada viernes o sábado, el artista les cuenta a sus seguidores el tema que trabajará en clase, y a los que estén interesados les envía una imagen que será el ejercicio de la clase.

Fuente y Fotografía eltiempo.com

Avatar

Por Oscar Mendez

Periodista Colombiano y Director del Portal Web www.radionoticiascasanare.com