Las autoridades capturaron cuatro personas entre las que se encuentran dos funcionarias de la autoridad sanitaria del país. Juez las deja en libertad condicional.
Una investigación que inició hace dos años terminó con cuatro capturas en el departamento del Casanare y que involucró funcionarios y ex funcionarios del Instituto Colombiano Agropecuario, ICA, así como a un ganadero que según las autoridades, lideró una red delincuencial, especializada en la elaboración de guías fraudulentas para la venta y transporte de ganado.
El Comandante de la Policía Seccional Casanare, Coronel, Juan Carlos Restrepo, dijo en la alianza informativa de Radio Noticias Casanare, RNC Noticias y Diariolaeconomia.com, que en esta acción fueron capturados cuatro integrantes de la mencionada organización criminal denominada “los falsicas”. El oficial precisó que a los encartados se les vincula judicialmente por los posibles delitos de concierto para delinquir, acceso abusivo a sistemas informáticos, cohecho impropio y falsedad ideológica en documento público.
“Esta organización delincuencial estaba liderada por alias Nacho, ganadero que fue capturado en el departamento de Boyacá, dos funcionarias del ICA y una exfuncionaria de la misma entidad. Esas personas al parecer recibían dinero a cambio de ingresar información a los sistemas del Instituto Colombiano Agropecuario, sin la autorización de los propietarios de 28 predios pecuarios en donde se pudieron generar 289 guías sanitarias de movilización internas fraudulentas que permitieron la comercialización en el mercado negro de alrededor de 3.000 cabezas de ganado de dudosa procedencia, avaluadas aproximadamente en 5.000 millones de pesos”, declaró el señor comandante de Policía en el Casanare.
Tras las sospechas, las denuncias fueron hechas por parte del mismo ICA en la gerencia de Luis Humberto Martínez Lacouture, a instancias de la Fiscalía General de la Nación que para éste fin logró articularse con la Policía Judicial que encargó a un cuerpo técnico de investigación y a la seccional de Policía Judicial de la Dirección de Carabineros y Seguridad Rural, equipo que inició los trabajos de seguimiento y canalización de pruebas.
Según el Comandante de la Policía Casanare, desde 2018 se le hacía juicioso seguimiento a estas denuncias que ya en su momento inquietaban al ICA por los riesgos que implica movilizar ganados sin la garantía de la sanidad animal, sin trazabilidad y sin el conocimiento puntual de sus orígenes.
Cabe anotar que después de dos audiencias, las funcionarias retenidas fueron dejadas en libertad condicional por un juez de garantías, pero sin ser desvinculadas del proceso puesto que hay todavía mucho que preguntar y demasiadas cosas por resolver. Según fuentes en Yopal, estas personas están en sus respectivas residencias, empero con la condición de presentarse ante la justicia en la eventualidad que sean requeridas.
Al margen de la decisión, las pesquisas seguirán porque los documentos fueron usados, dándole rienda suelta al abigeato, al contrabando y al tráfico ilegal de bovinos. Para la Policía hay indicios muy serios porque el ganado pasó sin el debido control y según la inteligencia cada guía podía tener un costo de 150.000 pesos aproximadamente. En opinión del comandante, los trabajos de la Policía en el Casanare seguirán intensificándose porque la meta es desarticular las bandas que tienen como actividad robar ganado en la región.
El trabajo, dijo, se llevará a cabo de manera coordinada con el gremio ganadero y las Federación Departamental de Ganaderos con quienes se busca avanzar y lograr mayores y mejores resultados por cuanto hay una percepción de inseguridad entre los productores. La Policía insistió en que no bajará los brazos porque esas sospechas pueden llevar a una segunda fase.
Un tema que encendió las alarmas es que mucho de ese ganado que al parecer fue transportado indebidamente pudo llegar de Venezuela, pero inquieta que buena parte del hato reportado tenía origen en otras zonas ganaderas del país, lo cual fue posible por unas guías fraudulentas que permitieron movilizar y vender vacunos con el respectivo riesgo sanitario para un país que hace lo posible por evitar la fiebre aftosa.
Aclaró el oficial que muchas personas involucradas en algunas operaciones fueron, factiblemente, asaltadas en su buena fe porque desconocían que los amigos del ganado ajeno estaban utilizando sus nombres y sus empresas para expedir las guías.
Fuente DiarioLaEconomia.com – Radio Noticias Casanare –