Los asistentes al estadio Atanasio Girardot se deleitaron este jueves con el espectáculo brindado por Independiente Medellín y Deportivo Cali. Aunque ambos mostraron debilidades en el aspecto defensivo, en el ofensivo expusieron su potencial y generaron múltiples ocasiones de gol que no contaron con efectividad en la definición y sí con un gran trabajo de Pablo Mina, arquero visitante.
Por lo mencionado anteriormente, el marcador se abrió ocho minutos antes de cumplirse el tiempo reglamentario. Andrés Felipe Roa eludió la marca de un defensor local al borde del área y con el pie izquierdo sacó un remate que no pudo controlar David González. Instantes después, el DIM igualó gracias a Didier Moreno, quien aprovechó un rebote dejado por Mina y sentenció el 1-1.
El primer finalista de la Copa Águila se conocerá el miércoles 27 de septiembre, día en el que se disputará el compromiso de vuelta de las semifinales con el Cali ahora como local. Llave abierta entre dos escuadras que cuentan con herramientas individuales para hacer daño al rival.
Tras el encuentro de hoy, el director técnico del Medellín, Juan José Peláez, que también se quejó del arbitraje, afirmó: “Medellín tuvo pretensiones. Había que jugar más al espacio que el pie y por momentos lo interpretamos. Necesitamos más continuidad en el juego, por momento nos ayudaron los aleros”.
Fuente y Fotografía ElEspectador.com